Los 5 asesinos de relaciones más destructivos (y cómo combatirlos)

Una relación es un santuario entre dos personas en el que pueden ser su verdadero yo, sin disculparse, sin miedo a ser juzgados.

Y toda relación se basa en ciertos fundamentos que ayudan a que funcione sin problemas y evitan que se encuentre con fallos y obstáculos. Es muy sencillo: si no cuidas tu relación, tarde o temprano estará condenada al fracaso.

Así que si quieres mantener tu relación sana, feliz y hacer que dure mucho tiempo, debes conocer las cosas que se ha demostrado que marcan la diferencia en cuanto a la calidad y la longevidad de la misma.

Después de que haya pasado algún tiempo, la mayoría de las parejas se sienten demasiado cómodas el uno con el otro, por lo que se olvidan de tener cuidado con ciertas cosas que ponen su relación en alto riesgo de una ruptura temprana y desordenada.

Para evitar cualquier complicación y mantener tu idílica relación tal y como es, ten cuidado con estos 5 asesinos de relaciones más comunes.

1. 1. Mala comunicación

Reconozcámoslo, todos creemos que somos muy buenos comunicando y transmitiendo nuestros puntos, pero la verdad es que todos metemos la pata y dejamos que la intensidad de la situación nos supere a veces.

Es casi demasiado fácil convertir una discusión normal en una sesión de gritos en la que no se hace nada productivo, y lo único que se consigue es que ambos estéis mucho más agitados y molestos el uno con el otro.

La próxima vez que quieras gritar a tu hombre, prueba esto. Por muy molesto que sea en ese momento, cuenta hasta diez, recoge tus pensamientos y escucha lo que tiene que decir por sí mismo.

No interrumpas, no grites y no señales con el dedo.

Escúchale y trata de entender de dónde viene. A su vez, él hará lo mismo contigo. Habla pacíficamente mientras intentas encontrar un terreno común, en lugar de culpar a alguien, lo que no deja a nadie contento.

2. 2. Incapacidad de confiar plenamente en el otro, incluso cuando eso significa dar un salto de fe

Si no puedes confiar en tu pareja, nunca serás verdaderamente feliz en tu relación. El objetivo de la relación de pareja es saber que os cubrís las espaldas el uno al otro pase lo que pase.

Pero no funciona si dudas de cada cosa que dice y hace, lo que en definitiva es una pérdida tóxica de tu tiempo.

A veces, estar en una relación significa dar un gran salto de fe y creerles aunque no tengas pruebas de que dicen la verdad.

Es tu persona y tu roca. ¿Te mentiría? Creo que sabes la respuesta a esto. Así que dale el beneficio de la duda y confía en que está tomando buenas decisiones y te mantiene informada.

Hasta que demuestre lo contrario, elige tener fe en él y permítete ser feliz sin esa carga innecesaria de sospecha.

3. Identificarse únicamente como la novia de alguien

Mantener tu propia identidad a lo largo de tu relación es crucial para que ésta dure y tenga éxito.

Es bonito cuando estáis tan unidos que termináis las frases del otro y no os importa echar la siesta cuando estáis juntos sin necesidad de hacer nada. Se siente bien hagas lo que hagas, siempre que estéis juntos.

¡Pero no dejes que tu papel de novia sea toda tu identidad!

Recuerda quién eres fuera de tu relación,m y sigue haciendo tus cosas. No descuides a tu gente y tus pasiones, y asegúrate de encontrar un equilibrio entre tus dos mundos.

Eres una novia increíble y eso es una parte fantástica de tu vida, pero hay mucho más en ti que eso. Así que no pierdas de vista tu otro mundo y sé fiel a ti misma.

4. Poner excusas al otro por miedo a estar solo

Seguro que habrá momentos en los que ambos meteréis la pata, y lo que debe hacer un adulto es perdonar, aprender de ello y seguir adelante.

Pero cuando se trata de un comportamiento de mierda y de abuso emocional, no debes en absoluto poner una excusa para ese tipo de comportamiento. Es inconmensurablemente mejor estar sola que con alguien que te degrada.

Asegúrate de que te tratan bien, y perdona sólo cuando tu corazón te diga que es lo correcto. Si percibes que tu pareja está realmente arrepentida de ciertas acciones que te han hecho daño, busca en tu corazón el perdón.

Pero nunca dejes que ocurra dos veces. Una vez es un error, dos veces es una elección.

5. No cubrirse las espaldas en las buenas y en las malas

A veces, tu pareja asumirá más de lo que puede manejar. A veces, no estarás de acuerdo con sus decisiones, pero tienes que dejarle hacer lo suyo y, si es necesario, dejarle aprender de sus errores.

Se supone que debéis apoyaros mutuamente pase lo que pase. Incluso cuando te parezca que es una mala idea, deja que lo intente y anímale todo lo que puedas.

Es importante que le cubras la espalda y viceversa, porque sin el apoyo del otro, ¿dónde estaríais?

Sé el mayor animador de tu pareja y demuéstrale que le tienes, siempre. Si falla, sé su hombro para llorar, y si tiene éxito, sé una novia orgullosa.

A veces, estar ahí y no interferir es lo mejor que puedes hacer.

No siempre estarás de acuerdo con sus decisiones, pero eso no significa que no puedas alentarle para que tenga éxito. Estate ahí incluso cuando sea difícil hacerlo, y él hará lo mismo por ti.