7 razones por las que aún no puedes superar a tu ex aunque hayáis roto hace tiempo

Tu pasado aún te persigue y no puedes dejarlo atrás. Eso es lo que te impide olvidarlo. Tú eres la razón por la que no puedes dejarlo ir.

Tu pasado te impide disfrutar de los momentos presentes. Eres incapaz de olvidar esa parte de tu vida y eso es lo que te hace sentir tan miserable ahora. No dejes que sea la razón por la que no puedes ser feliz ahora.

Él es sólo un fantasma del pasado y tú quieres seguir adelante, dejando el pasado donde debe estar.

Así que, antes de decidirte a iniciar una nueva relación romántica, tienes que estar segura de haber superado tu pasado, porque si no lo has hecho, tu nueva relación va a sufrir. Y no tengas miedo de dar un paso hacia el futuro sólo porque alguien te haya roto el corazón. Es algo que ocurre. A todos nos rompen el corazón, pero todos nos curamos después de un tiempo y seguimos adelante.

Seguir adelante no es tan difícil como crees, sobre todo si conoces las verdaderas razones por las que aún no puedes superar a tu ex.

Comparas tu relación actual con la pasada. Sin embargo, no puedes esperar que todo sea igual. Al fin y al cabo, tu relación pasada fracasó, lo que significa que el hecho de que todo sea igual no es una buena idea. Deja de lado a él y los momentos que tuvisteis juntos. Céntrate en la nueva relación y en el hermoso presente y en un futuro aún más hermoso que te espera si juegas bien tus cartas. La comparación no te llevará a ninguna parte, salvo a la destrucción.

Las emociones se desbordan. Te sientes confuso, enfadado, dudoso… muchas cosas al mismo tiempo. Te acostumbraste a estar en una relación y ahora que estás fuera de ella no puedes deshacerte de ese paradigma de «en una relación». Tu cerebro estaba acostumbrado a pensar que eras feliz y estabas en una relación y ahora, de repente, no lo estás. Es una situación bastante estresante, no sólo emocionalmente sino también para la química de tu cuerpo. Intenta verte ahora como una persona soltera. Camina por la calle pensando que eres lo que eres y, después de un tiempo, te acostumbrarás a ello.

Puede que te haya dejado de repente o que supieras que iba a pasar, pero no tenías ni idea de por qué quería romper contigo. Si no tienes un cierre, no estás preparada para seguir adelante porque seguirás obsesionada con lo que salió mal entre vosotros. El cierre es extremadamente importante porque significa que has finalizado las cosas y has cerrado el último capítulo de ese libro. Y si no finalizas algo, no puedes empezar nada nuevo. Tienes que darte tiempo para llorar la pérdida, asumir responsabilidades por tus actos y mirar al futuro.

Echas de menos a la persona en sí, lo cual es totalmente comprensible, pero no tiene por qué ser la única razón por la que no lo has superado todavía, y no lo es. Eso es sólo una pequeña parte de toda la historia. La mayor parte del trabajo que hay que hacer para sanar lo tienes que hacer tú y nadie más. Tienes que recuperar tu respeto y tienes que empezar a quererte a ti misma.

Si te descuidó en tu relación o siempre fuiste la última en su lista de prioridades, ésta es la principal razón por la que no puedes superar a tu ex. Te quitó tu autoestima al tratarte como no te merecías y ahora crees que no sirves para la vida. Crees que estás perdida sin él y tienes miedo porque no sabes qué hacer, así que el primer pensamiento que tienes es volver con él. Eso no resolverá nada. Tienes que recordar que eres un hermoso ser humano, digno de toda la atención y el amor que puedas recibir. Te mereces ser feliz, así que no te impidas serlo.

Todo lo que ves o hueles te recuerda a él porque todavía no lo has dejado marchar. Es perfectamente normal que te sientas así porque te arrancaron una gran parte de ti y tienes que echarlo de menos. Diablos, si tuvieras una pequeña piedra en el bolsillo durante mucho tiempo, te acostumbrarías a ella y la echarías de menos. Si sigues pensando en él después de que haya pasado algún tiempo, entonces es que aún no estás preparada para seguir adelante. Dale algo más de tiempo porque todos nos curamos de forma diferente.

Formaba parte de tu identidad. Tu cerebro lo memorizó como eso y si lo vuelves a ver después de una ruptura, esas viejas emociones volverán a surgir porque antes erais tú y él juntos y ahora eres sólo tú y sólo él. Antes, todo lo que hacías giraba en torno a él y ahora estás sola y no tienes que ocuparte de nadie y es confuso. Una gran parte de ti ya no está y es natural que te sientas triste y que quieras recuperarlo, pero eso no tiene por qué significar que volver a estar juntos sea algo bueno.