Después de algún tiempo, el matrimonio se vuelve aburrido porque estás atrapado en una rutina. Estás atrapado haciendo siempre las mismas cosas. Y esto es lo que más mata la química entre dos personas.
Mata lentamente la intimidad, que es la base de toda relación exitosa. Vale, no desaparece del todo. Hay momentos en los que no podéis quitaros las manos de encima, pero esos momentos son menos frecuentes a medida que pasan los años.
¡No tienes que asustarte si esto ocurre porque es normal! Cuando vives con la misma persona durante algún tiempo y cuando sabes cómo actúa y cuál es su rutina, es normal que después de algún tiempo la emoción desaparezca.
Aunque esto ocurra, hay una forma de evitarlo. Tienes que tomarte tu tiempo e intentar construir la pasión con tu pareja, y así elevar el nivel de intimidad en vuestra relación.
Si no lo haces, es probable que tu relación fracase. Ambos podéis soportar la falta de emoción y el aburrimiento en una relación durante algún tiempo, pero después de un tiempo se vuelve frustrante.
Así es como aumentaréis el nivel de vuestra intimidad, y mantendréis vuestra relación viva y más radiante que nunca. Lo más importante es la inversión por parte de ambos.
1. Dale a tu pareja algo de crédito
Reconoce a tu pareja y las cosas que hace. Puede que no estés en la misma página con ellos en este momento, puede que no te guste lo que hacen, pero si se esfuerzan y dan lo mejor de sí mismos, entonces tienes que darles crédito por ello.
Hazles saber que respetas el hecho de que se estén esforzando. Esto les dará una palmadita en la espalda, y serán capaces de hacer cosas aún mayores.
Una persona tiene que tener un comienzo, y mediante el estímulo, conseguirá incluso más de lo que creía que era capaz.
Y al hacer que se sientan reconocidos, vas a aumentar tu nivel de intimidad. Tu pareja agradecerá tu apoyo, y te lo devolverá abriéndose y mostrando más emociones.
2. Duerme desnudo después del sexo
El sexo no es la única forma de intimidad que puedes experimentar. Es perfecto, es bonito, pero no siempre implica compartir emociones y hacer el amor. A veces, el sexo sólo sirve para desahogarse y desahogarse.
Si esto ocurre a menudo, la única forma de aumentar vuestro nivel de intimidad es intentar compartir las emociones. Y hay una forma de hacerlo. Después de tener relaciones sexuales, tumbaos desnudos uno al lado del otro.
Quedaos tranquilos y abrazados si queréis. Pero no dejes pasar esa sensación. Mantenla y disfrútala. Esto aumentará vuestra intimidad y dará un nuevo giro a vuestra relación.
3. Recuerda los buenos momentos y mira al futuro
Saca ese álbum de boda de la estantería polvorienta. Límpialo y revive tus recuerdos felices. Las fotografías de vuestro día más importante os devolverán a la época en la que estabais locos el uno por el otro y en la que no podíais dejar de tocaros.
O si no estáis casados, intentad recordar los buenos momentos: vuestra primera cita o algunas cosas divertidas o inusuales que os ocurrieron cuando acababais de empezar a salir.
Esto hará que vuelva esa vieja sensación de felicidad, esa fase de luna de miel, y os unirá más. Incluso cuando habléis de lo que habéis hecho y de dónde habéis estado, puede que os venga a la cabeza algo loco y emocionante y decidáis hacerlo o que decidáis recrear algo romántico o divertido que hayáis hecho alguna vez.
De cualquier manera, la intimidad aumentará y mantendrá viva vuestra relación.
4. Mantén el contacto visual
Nunca evites el contacto visual de tu pareja. Los ojos son espejos del alma, y puedes llegar a saber todo sobre alguien con sólo una mirada a sus ojos, porque los ojos no pueden mentir.
Al miraros a los ojos, crearéis un vínculo que no se puede romper fácilmente. Los ojos reflejan nuestra vulnerabilidad, y revelan mucho más de lo que queremos admitir.
Así que, a veces, cuando no te apetece contarle a tu pareja todo lo que te pasa por la cabeza, o simplemente no puedes, basta con una mirada a los ojos para que entienda por lo que estás pasando.
Convierte esto en algo habitual. Intenta mantener el contacto visual en completo silencio durante unos minutos cada día, y verás lo mucho que descubriréis el uno del otro sin ni siquiera decir una palabra.
5. Reíd juntos
Comparte las risas. Abrid el alma y el corazón, y rodad por el suelo de risa. Nada puede acercaros más el uno al otro que esto.
Es una experiencia que compartís. Sólo dura ese momento concreto, y nunca volverá a ocurrir, al menos no de la misma manera.
Vas a recordar el momento en el que te reíste a carcajadas, y siempre será un recuerdo feliz que puede seguir provocando una sonrisa en tu cara incluso meses después de que haya sucedido.
De este modo, estás estableciendo un vínculo con esa persona y aumentando el nivel de intimidad porque los dos compartisteis algo que era sólo entre vosotros y nadie más.
6. Deja notas
Notas sexys, románticas, de cualquier tipo. Sorprende a tu pareja antes de irte al trabajo y escríbele una nota. No tiene que ser nada importante, sólo algo escrito en un papel.
Un recordatorio de que estás en su vida y de que le quieres más que a nada.
Estamos hartos de pantallas y textos. Haz algo anticuado como escribir un poema o dejar una nota en el espejo.
O si te sientes más pervertida que de costumbre, escribe en un papel tu lista de deseos sexuales y cómo te sientes en ese momento, y déjale con ganas de más. Créeme, cuando vuelvas, eso lo dejará boquiabierto.
7. Sigue saliendo con él
Mantén siempre viva esa chispa, y encuentra tiempo para vosotros dos solos. Tanto si estás en un matrimonio como en una relación comprometida, tienes que tener tiempo para pasar con tu pareja.
Tienes que encontrar tiempo para hablar, reír o llorar. Lo importante es que estéis a solas el uno con el otro y que os sintáis libres para abriros y hablar de todo sin que os molesten.
8. Sexo en público
Sólo pensar en esto es excitante. Hacerlo en un lugar público aportará definitivamente excitación a vuestra relación. Si no lo has probado y tu relación empieza a ser aburrida, sal y hazlo.
Y en el lado positivo, tienes ese miedo a que te pillen que ambos compartís en ese momento que también os unirá más.
Y si os pillan, siempre tendréis algo de lo que reíros después.
9. Rompe la rutina
La rutina es el mayor enemigo de toda relación exitosa. Te quedas atrapado en ella, poco a poco tus días se vuelven iguales, te cansas de ella y quieres salir.
Este es el asesino más frecuente de toda relación. Así que, para mantener las cosas en el lado bueno, intenta hacer algo diferente de vez en cuando. Aporta algún cambio para romper la rutina, y no te cansarás de tu relación.
10. Quiérete y respétate
Serás feliz con tu relación cuando estés contento contigo mismo. Si no estás satisfecho contigo mismo y si no te respetas, tu pareja te mirará de la misma manera. La energía negativa que irradias se trasladará a tu pareja.
Esto también arruinará tu intimidad. Si las cosas no están bien y claras entre vosotros, no podréis mantener la comunicación. Y si no hay comunicación, la intimidad no puede crecer.
Todos los días me enfrento a aquello que llaman «amor». Mi nombre es Vanesa y conectaré contigo a través de todos mis textos.