Esta soy yo, recogiendo por fin los pedazos y siguiendo adelante

Siempre había esperado que llegara este día y que pudiera ser libre. La hermosa sensación de plenitud me invadió en el momento en que me di cuenta de que por fin había reunido las fuerzas para recoger todos mis pedazos rotos que quedaron frente a tu puerta y seguir adelante. Estoy avanzando, por fin.

Esta soy yo. La versión pequeña y frágil de mí misma. La que dijiste que era demasiado débil para este duro mundo. Quiero que vuelvas a mirar y me veas elevarme por encima de todo lo que he pasado. Recojo mis cosas. Me voy.

¿Te parece intimidante ahora que sabes que la pequeña, tímida y débil chica que has estado utilizando para complacer todas tus necesidades es finalmente capaz de seguir adelante y hacer algo que la haga feliz?

¿La idea de que sea feliz te hace dudar de tu juicio? Cuando dijiste que nunca podría ser feliz sin ti, en realidad te creí, pero mírame ahora. Mi vida nunca había sido tan hermosa.

No confundas esta fuerza y esta cantidad de autoestima con una duración demasiado larga, porque me romperé. Seré sincero contigo, me romperé en algún momento.

Pero no volveré. No volveré nunca. Cuando un día cada átomo de mi cuerpo esté pidiendo a gritos tu contacto y mis oídos estén deseando escuchar tu voz, sufriré sola en mi habitación, lejos de ti. Ni siquiera sabrás que está ocurriendo.

Esta soy yo, encontrándome por fin a mí misma. Lo perdí todo cuando estaba contigo. Perdí el brillo de mi piel y la luz de mis ojos. Perdí todos esos bellos momentos de alegría y mi risa ruidosa que tanto me gustaba también desapareció.

En algunos momentos me ponía delante del espejo y no reconocía ese cadáver que tenía delante. Hoy, miro a esa mujer fuerte a los ojos y el espejo ya no me asusta. Me anima a mantener las manos rectas y a coger todos los trozos de mí que una vez llamé míos.

Esta soy yo, alejándome por fin. Mírame bien, por última vez. Nunca volverás a ver esta cara tan cerca. Quizá lo veas en un desconocido o en ese desconocido de enfrente que también te resulta un poco familiar.

Esa persona seré yo y te arrepentirás del momento en que dejaste que esto sucediera. Recordarás todas las veces que dejaste que me enamorara de ti sin que me atraparas. Recordarás la forma en que me mirabas con tus ojos fríos mientras intentaba explicarte que los libros que quemaste eran los que me regalaron por mi cumpleaños; mi abuela aún cree que los tengo.

Esta soy yo, que por fin veo la verdad. Nunca me quisiste. Me utilizaste para hacer tu vida un poco menos miserable. Era mucho más fácil hacerme sufrir que ver cómo se desmoronaba tu vida.

Sin trabajo, sin vida, sin alma. No te queda más que lamentarte y tener remordimientos por ti mismo. Menos mal que he visto la verdad y que no me he dejado caer más en tus mentiras y manipulaciones.

Esta soy yo, siendo libre. Habrá momentos en los que me acordaré de ti y me harás daño, en algún lugar del fondo de mi corazón donde pongo a todas las personas que una vez significaron algo para mí (hace mucho tiempo).

Pero seré libre . Seré libre de tus manos torturadoras y de tus palabras punzantes. En este momento, me estoy liberando de tus garras y me estoy recuperando.

Esta soy yo, recogiendo por fin los pedazos y siguiendo adelante. Por fin he reunido las fuerzas.