Por qué es un privilegio poder amar a una chica con un gran corazón

Aunque sea un tópico decirlo, la mayoría de las chicas como yo, con un gran corazón, elegimos a los chicos equivocados para amar. Elegimos a los chicos que no se preocupan por nosotras en absoluto. Que se pasan el tiempo jugando a juegos mentales con nosotras y actuando como si no hicieran nada malo. Y eso es porque, a sus ojos, no están haciendo nada malo porque no ven las cosas como nosotras.No ven que analizamos todo lo que dicen, cada texto o Snap que envían, cada foto que les gusta de otra chica en Instagram, o cómo nos damos cuenta cuando se fijan en otra chica cuando están con nosotros. No se dan cuenta de que sabemos cuando salen con su ex novia o cuando pasan la noche con sus chicos bebiendo en lugar de con nosotras. Además, no se les ocurre que las chicas hablan, y que si se les ve haciendo algo que no deben hacer, nos llegará. Y a pesar de todo esto, por alguna extraña razón, siguen sin ver la tristeza en nuestros ojos cuando no recibimos el respeto que merecemos. Y odio admitirlo, pero cuando eres una chica que tiene un gran corazón, por mucho que lo veas y sepas que todo esto está pasando y está mal, también lo pasas por alto.

Ahora bien, ¿por qué hacemos esto? ¿Por qué seguimos amando a tipos que no nos tratan como deberían? Es porque tenemos un corazón muy grande, y cuando estás enamorada de alguien, no ves sus defectos ni quieres reconocerlos. Las chicas con un gran corazón son una raza rara, porque aman como nadie. Aman con fuego en el estómago y una lealtad en la sangre que nadie más entenderá. Quieren ver lo bueno en el chico del que se han enamorado, y no creer que es el malo que todo el mundo hace ver. Tendemos a encontrar una determinada cualidad en un chico por el que nos sentimos atraídos que nos hace quererlo. Ya sea la sensación que tienes cuando entra en la habitación, o la forma en que te sonríe después de haber terminado de flirtear, es esa única característica la que hace que tu corazón se detenga y te hace sentir algo que nunca antes habías sentido.

A pesar de todo lo malo que puedan hacer, eso no impide que los amemos por esa única característica, y déjame decirte que es una mierda. Porque por muy grande que sea tu corazón de amor por cierta persona, no puedes conseguir que se reduzca por mucho que luches contra ello. Luchas contra él, intentas cortarlo, lo bloqueas en todas las redes sociales, pero no funciona. Tu corazón es tan fuerte y grande que puedes pasar por alto muchas cosas porque lo quieres en tu vida. Y déjame decirte que es un rasgo muy bueno, ser capaz de amar a alguien a pesar de sus defectos, y amar con una lealtad que otros no entienden. Pero déjame decirte algo: ÉL NO TE MERECE NI EL AMOR QUE LE ESTÁS DANDO.

No se merece a la mujer que le quiere después de todas las veces que mete la pata y dice que va a cambiar. No se merece a la mujer que se queda con él después de todo este tiempo llorando a diario. No se merece a la mujer que gastaría cantidades escandalosas de dinero en regalos de Navidad sólo para hacerle feliz. No se merece a la mujer que conduciría más de veinticuatro horas sólo para verle un día. No se merece a la mujer que ama tan ferozmente que asusta a los demás por lo mucho que hará para hacerle feliz. ¿Y sabes por qué no la merece? PORQUE ÉL NO HARÍA LO MISMO POR ELLA.

Las chicas con un gran corazón se merecen que alguien las quiera tanto como ellas. Llega un momento en el que te das cuenta de que no puedes más. No es justo luchar por alguien que no lucha por ti. Por muy bueno que sea tener un gran corazón, es igual de bueno saber cuándo es el momento de apagarlo o al menos intentarlo. También te dolerá cuando lo apagues, créeme a mí y a un millón de chicas más cuando digo que te dolerá, pero al final merecerá la pena. Es un privilegio poder salir con alguien que ama tanto, algo que la mayoría de los hombres de este mundo no entienden. Sin embargo, de vez en cuando, encontrarás a alguien cuyo corazón esté a la altura del tuyo, y cuando lo hagas, te alegrarás de que esta vez hayas decidido dar tu amor a alguien que lo merecía por fin.

byKaylin Ochs